29 de agosto de 2010

An Education

Principios de los 60. Jenny, una brillante jovencita prepara su acceso a la Universidad de Oxford, pero tras el encuentro fortuito con el interesante y enigmático David, un hombre culto y catorce años mayor que ella, descubrirá una realidad que jamás hubiera soñado.

Hay que reconocer que durante la primera parte, esta película puede parecer un pastelito, pero si os gusta el arte y alguna vez habéis puesto el pie en esferas similares, os encantará.

La trama evoluciona y nuestro personaje principal madura de forma palpable. La película retrata muy bien esa transición y el precio a pagar.

A mí, personalmente, me fascinó. Ya sabéis que en el fondo soy de otra madera...


15 de agosto de 2010

Moon

Entrar por la puerta grande en el primer intento no es gesta fácil y más siendo hijo de y con un carrera videoclipera más bien justita.
Si encima el sanbenito de hijo de es porque tu papasito es David Bowie sólo tienes dos opciones: o pruebas hacer una comedia de mierda o le plantas un homenaje al Duque.

Para su suerte, Duncan Jones optó por la segunda opción, y en un hora y media nos transporta a la cara más solitaria y sórdida de la Luna de la mano de Sam, un astronauta minero y su robot, que gestiona todos y cada uno de sus movimientos.

Con este argumento cualquiera podría temer una película lenta, claustrofóbica e intimista pero Jones se esconde un as en la manga que saldrá a relucir (y de qué manera) más o menos a mitad de película, dando paso a una retorcida reflexión futurista y a más de un dilema existencial del protagonista, que nos hará partícipe de todo el abanico de sentimientos y sensaciones que siente... en el otro lado de la Luna.

Muy buena película, queridos amantes de la ciencia- ficción.

10 de agosto de 2010

CASI de todo

Ya lo sé, ya lo sé... verguenza debería de darme el no haberme paseado en tanto tiempo por mi jardín...

Os podría hablar de las risas que eché viendo Plan Imperfecto (Stephen Dorff está maldito, nunca mejor dicho), la sorpresa que me llevé viendo Daybreakers (ya sabéis, los vampiros están más vivos que nunca).

A destacar también las siestas que me he pegado intentado ver la última entrega de Piratas del Caribe o cómo me robó el alma la terrible a la par que fantástica Precious.

El Verano empezó mientras estrenaba el aire acondicionado de un cine viendo Que se Mueran los Feos (muy divertida y ligera; recomendable para cualquier ser humano) y ha seguido avanzando con películas que iré comentando durante estos días.


En todo este tiempo nos hemos despedido de Lost (lo importante no fue el final, sino el camino). Hemos seguido los pasos de Sookie en True Blood, las gotitas que dejaba Dexter y hemos descubierto más colmillos que nos encantan en Vampire Diaries.
Y cómo no, nos dejamos querer por Fringe.



Saludos estelares, queridos soñadores.