Hairspray

Ayer los gamberros de The Rocky Horror Picture Show Spain no nos dieron cuartel y obligaron a desplazarse a los Wasabitas and Friends para disfrutar y gritar con el Sing-Along de Hairspray que organizaron en el Music Hall de Barcelona. Todo fueron carcajadas, comentarios divertidos y mucho... ¡mucho baile!

¿John Travolta haciendo de madre? ¿Su marido es Christopher Walken? Saca tu bote de laca y crépate el pelo.

Corrían finales de los ochenta. John Waters se saca de la chistera una vez más una mordaz crítica, concretamente a la sociedad conservadora a la que tanto ama/detesta  y que se centra en la discriminación racial y en la física, por todas esas mujeres que no tienen cuerpos de infarto o sufren sobrepeso. Como madre de la redondita protagonista, la siempre graciosa Divine. Y lo más importe: A ritmo de baile.

Su nombre: Hairspray.

Saltemos en el tiempo: 2007. Dado el arrollador éxito de Hairspray en Broadway, se decide hacer una adaptación al cine (que ya sabemos que originariamente era la película de Waters, así que también es remake). Como capitán del barco, Adam Shankman (el director de la pendiente de estrenar, también musical Rock of Ages).
A estas alturas estaréis pensando: Muy bien, bonita, pero ¿de qué va la dichosa película? (O no y, resulta que ya la habéis visto. Para unos y para otros, allá va). 

Baltimore, 1962. La joven y soñadora Tracy es una fan del Show de Corny Collins (aquí también lo somos), un espacio musical de una televisión local que tiene a toda la ciudad moviendo las caderas.
Al quedarse embarazada una de las coristas del show, Tracy se presenta, logrando un puesto a la par que empieza a tener una guerra abierta con Amber Von Tussle, compañera del show (y de clase) que no dudará en ponerle todo tipo de zancadillas para desaparezca del programa con la ayuda de su retrógrada (y rubíssima) madre (Michelle Pfeiffer).

A esto hay que sumarle que Tracy está enamorada de Link (en algún momento de vuestras vidas os teníais que cruzar con Zac Efron, que empieza a parecer el hermano pequeño de Jared Leto), el bailarín del programa (y noviete de la insulsa Amber).
Por otro lado, han retirado un programa musical de la disc-jockey afroamericana Motormouth Maybelle (una Queen Latifah rubia, aquí todo es posible, amigos wasabitas), que con el apoyo de la joven y de los suyos logrará que se empiece a tener en cuenta a la gente de color en el panorama musical televisivo sesentero.

¿Qué nos ofrece Hairspray? Números musicales sorprendentes (adorable Edna, la amorosa y rellenita madre interpretada por John Travolta y su marido... Curioso que Christopher Walken  sea lo más normal de toda la peli), canciones desenfadadas y una obligación: ¡¡¡Bailar!!! ¡¡Nadie se puede resistir a mover el esqueleto a ritmo de twist!!

No os voy a dar más la lata... Os dejo el trailer.
Por lo bien que nos lo hemos pasando revisitando este musical y por las altas dosis de laca en nuestras melenas, le damos por nota diez wasabis ultrarrepeinados.