Debido a la sobredosis de celuloide durante esta semana en la Fiesta del Cine (y que nos enclaustramos en diversas obras de teatro) publicamos en riguroso diferido. Ya saben que quien hace lo que puede, no está obligado a más.
Final de nuestro periplo por Sitges así que vamos a desgranar cuanto antes nuestras tres últimas películas.
Como algunos ya sabréis, tuvimos la desgracia de que nos colaran en la película sorpresa Spring Breakers, la última excreción de Harmony Korine en la somos testigos de excepción de dos horas de basura en estado puro. En ellas (hubiese preferido invertirlas en comerme un arròs a la sitgesana) se echa falta absolutamente todo: interpretaciones, diálogos y un argumento. La fotografía resulta la excepción y las dichosas lucecitas de neón junto con unos filtros noventeros (que fue lo único que tuvo en cuenta el mamarracho de Korine)
Ojalá hubiese regalado las entradas, habría sido la mejor opción para evitar dosis de chonis enfudadas en bikinis y un James Franco haciendo de hiphopero haciendo el payaso.
De regalo Selena Gómez haciendo de mojigata y el trailer.