25 de octubre de 2010

Colorful

¿Qué pasaría si hubieses hecho un acto terrible que no recuerdas y el Destino te diera otra oportunidad?

La premisa es una idea manida y más que planteada con anterioridad, pero la originalidad de esta película empieza cuando esa gran pregunta la tiene y la vive una alma (Boku, que significa Yo en japonés) que ignora su pasado y que vivirá temporalmente en el cuerpo de un niño de unos catorce años: Makoto, un púber apático, solitario, distante y con grandes dotes para el arte, que llevaba tiempo contemplando cómo su mundo se tambalea y que había decidido poner punto y final a su vida.

Durante este período en el que estará en ese extraño cuerpo, Boku deberá descubrir qué hizo él mismo, así como conocer que indujo a Makoto a tomar esa terrible determinación para decidir acabar con su vida.
Para esta hazaña estará acompañado de ParaPara, un vigilante, un protector o un ángel que velará y le aconsejará en los momentos críticos.

Colorful habla de la redención, del amor y la amistad, pero no deja de ser una cruda crítica a la sociedad japonesa (sobre todo a nivel familiar y escolar) con un argumento que desde el inicio te revuelve las entrañas.
Un buen mensaje y una gran historia que no decepcionará a los amantes de la animación más profunda e intimista.


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