Reconozcamos que Rebecca De Mornay borda su rol ( La Mano que Mece la Cuna unos siglos después, esa fue la sensación general del público).
Huelga decir que es la única en la película que hace bien su trabajo (el resto de actores excepto Deborah Ann Wol, son bastante mediocres, y caso perdido es la nefasta protagonista). Ya sé, hablamos de una película que sólo pretende entretener, disgustar y en algún momento horrorizar.
Para descubrir si lo consigue (o no) tendréis que verla.
Está claro que para la carrera Darren Lynn Bousman ha sido un pequeño patinazo; veremos qué tal se las apaña con su asesino que pretende zumbarse a 90 personas a modo de record en Ninety (Opción A: a minuto por persona ya tenemos cinta. Opción B: gas letal, armas nucleares...sería una cutrez).
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