Un par de científicos arrojan unos vertidos químicos muy tóxicos, lo que provoca una serie de mutaciones. ¿Y quién será nuestro particular antihéroe? Habrá que verla para saberlo…él es de lo mejorcito de la película. Yo lo definiría como un participante de humor amarillo delante del chaquetero de Godzilla (pero a la coreana).
Me ha gustado por una montón de chorradas: frikis tirando latas de refresco al bichaco como quien tira cacahuetes a un mono, yankis salvamundos que son imbéciles perdidos (en la película no se libra ni uno), la ligera crítica hacía el planteamiento militar americano…(no quiero spoilear, así que cierro la boca).
Los primeros 20 minutos y los últimos 20 minutos están bien para ser del género “mastodonte cabrón” nada de escenitas con maquetas ni efectos pasados de moda, menos mal.
Otra cosa que me ha gustado es que el bichejo no tuviera escrúpulos, era como la antítesis de mi querida Gamera (que es un trozo de pan que sólo machaca a bichos de su tamaño) y está bien que por fin haya ciertos giros más o menos nuevos en el argumento (desde la familia protagonista, al personaje principal hasta el desenlace).
En fin, me extraña que haya participación americana, pero los fx son de una casa californiana y los resultados son bastante agradables de ver pero no son la octava maravilla. En definitiva, la película promete entretenimiento y cumple de sobras. En este género no se puede pedir más.
Por cierto, está pendiente de estreno en estas tierras y ha sido un taquillazo por Corea.
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